En los artículos anteriores, hemos reflexionado sobre dos aspectos del cine y de las teleseries que afectan a la esfera social: la legitimación de actitudes y comportamientos, y la “autoridad social” para representar un modelo válido de familia. Esto nos ha permitido conocer la influencia del audiovisual (cine y televisión) en la esfera externa y colectiva del ser humano: la influencia sociológica. Pero las pelícuklas y teleseries influyen también en la esfera interna e individual de la persona humana: ésa es su influencia psicológica.
Así, por ejemplo, una chica joven podría pensar: “¿Cómo me van a decir mis padres que la relación sexual se orienta a la vida y sólo tiene sentido en el matrimonio? ¡Si yo sé cómo es (autoridad epistemológica) y cómo debe ser (autoridad deontológica) el sentido de la relación sexual! ¡Si sé que tiene sentido cuando hay “amor”, cuando es expresión de un sentimiento! ¡¡Si lo he visto con mis propios ojos, si lo he vivido!!”. En realidad, lo ha visto y lo ha “vivido” en el cine, pero lo ha asimilado como algo vivido en primera persona.
2 respuestas
Posiblemente el aspecto fundamental en que incide el cine en la gente en general y en la juventud en particular, no es tanto en las salas cinematográficas de exhibición, a las que va cada vez menos público dado el precio de las entradas, como en la pequeña pantalla (TV), por la que se meten todo tipo de bodrios, barbaridades y basuras. Y me refiero a todas
esas series, excepción de algunas que están bien hechas y que transmiten mensajes al menos inócuos, que ven todo tipo de personas, desde niños hasta personas de la llamada tercera edad.
Es obvio que esos modelos o paradigmas plenos de antivalores, en muchísimos casos, es los que se suele "grabar", a veces de manera indeleble, en el criterio de muchos telespectadores.
Para eso están las subvenciones, sobre todo al cine español.
Quizá, en sus mensajes subliminales, queda lo bochornoso de la cutrez y de lo irremediable a la hora de devaluarse, por sí misma, tan averiada mercancía. "En el pecado, va la penitencia".
De acuerdo de nuevo contigo, y hoy he aprendido dos conceptos nuevos: autoridad epistemologica y autoridad deontologica. La verdad que aprendo mucho contigo, además de gustarme la labor que haces. Josefina.